La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció la firma de las iniciativas para la expedición de la Ley General de Aguas y la reforma a la Ley de Aguas Nacionales, con el propósito central de garantizar el derecho humano al agua en todo el país.
Durante el acto, Sheinbaum destacó que el agua debe ser entendida y protegida como un recurso estratégico de la nación, y no como una mercancía sujeta a intereses económicos. En este sentido, subrayó que la iniciativa busca dejar atrás la visión neoliberal que durante décadas privilegió su explotación comercial por encima del acceso universal y equitativo para las familias mexicanas.
“La nueva ley recupera el agua como un bien público de la nación, un recurso que debe servir al pueblo y garantizar la vida digna, la salud y el desarrollo sustentable”, afirmó la mandataria.
La propuesta contempla mecanismos de regulación más estrictos en torno a concesiones y usos, así como nuevas disposiciones para asegurar el abastecimiento en comunidades rurales, zonas urbanas marginadas y regiones con problemas de sequía. Asimismo, plantea una mayor coordinación entre los tres niveles de gobierno para la gestión y preservación de las fuentes de agua.
Sheinbaum también hizo un llamado a la ciudadanía y a los legisladores para respaldar la iniciativa, que será discutida en el Congreso en las próximas semanas. Reiteró que se trata de un paso fundamental en la construcción de un país más justo y con igualdad de derechos.
Con esta medida, el Gobierno de México busca sentar las bases de una política hídrica sostenible que priorice a las personas por encima de los intereses privados, reforzando así el compromiso de la Cuarta Transformación con el bienestar social y ambiental.