El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, junto con Omar García Harfuch, han consolidado una estrategia integral de seguridad que involucra una colaboración estrecha entre los tres niveles de gobierno. Este esfuerzo conjunto busca garantizar la tranquilidad de los ciudadanos y enfrentar los principales retos de seguridad pública en el estado.
En una reunión reciente, Rocha Moya destacó la importancia de fortalecer la coordinación interinstitucional para combatir el crimen organizado y reducir los índices de violencia. “La seguridad es una prioridad que exige el compromiso de todos los niveles de gobierno, y juntos estamos construyendo un Sinaloa más seguro”, afirmó el mandatario estatal.
Por su parte, García Harfuch, reconocido por su experiencia en materia de seguridad, subrayó la necesidad de implementar tácticas innovadoras y recursos tecnológicos para optimizar las operaciones policiales. Entre las medidas anunciadas destacan el refuerzo de los patrullajes en zonas conflictivas, la instalación de más cámaras de videovigilancia y la capacitación continua de los cuerpos policiales.
Además, el plan incluye la promoción de programas preventivos en comunidades vulnerables, enfocándose en jóvenes para alejarlos de entornos delictivos. Estos esfuerzos buscan no solo atender el problema desde un enfoque reactivo, sino también erradicarlo desde la raíz.
Con esta estrategia, Rubén Rocha Moya y Omar García Harfuch reafirman su compromiso con la paz y la seguridad en Sinaloa, consolidando al estado como un referente en coordinación y eficacia en materia de seguridad pública.