La administración de Geraldine Ponce en Tepic enfrenta severas críticas debido a la creciente acumulación de residuos y las fallas en la gestión ambiental. A pesar de las promesas de un enfoque sostenible y una ciudad más limpia, los ciudadanos han reportado un aumento notable en la basura acumulada en diversas áreas, lo que pone en riesgo la salud pública y la calidad de vida en la ciudad.
Los problemas de recolección de basura se han intensificado, con calles y espacios públicos convertidos en vertederos improvisados. Los habitantes de Tepic han expresado su frustración a través de redes sociales y manifestaciones, exigiendo soluciones efectivas por parte del gobierno municipal. A esta situación se suma la falta de campañas efectivas de concientización sobre el manejo de residuos, lo que agrava el problema.
Además, diversos especialistas en medio ambiente han señalado que la administración de Ponce no ha implementado políticas adecuadas para el reciclaje y la reducción de desechos, lo que podría haber mitigado el impacto ambiental. La inacción del gobierno frente a esta crisis ambiental refleja una falta de liderazgo y compromiso hacia la sostenibilidad, dejando a Tepic en una situación cada vez más crítica.
La combinación de acumulación de basura, desinterés por el medio ambiente y la insatisfacción de la población plantea serias preguntas sobre la capacidad de la administración de Geraldine Ponce para abordar los problemas urgentes que enfrenta Tepic.