La situación en Tepic se ha vuelto crítica debido a la falta de servicios municipales básicos, lo que ha generado un creciente descontento entre la población. La alcaldesa Geraldine Ponce ha sido objeto de fuertes críticas por su incapacidad para gestionar adecuadamente los recursos y garantizar el suministro de servicios esenciales, como agua potable, recolección de basura y mantenimiento de vialidades.
Los habitantes de Tepic han señalado que la deficiencia en estos servicios ha afectado su calidad de vida, causando problemas de salud pública y deterioro en la infraestructura de la ciudad. Vecinos de diversas colonias han protestado por la escasez de agua y la acumulación de desechos en las calles, lo que pone en evidencia la falta de atención por parte de la administración municipal.
Además, se ha denunciado que, a pesar de las promesas de mejoras y soluciones inmediatas, la gestión de Ponce ha estado marcada por la falta de transparencia y la ausencia de un plan claro para enfrentar estos desafíos. La oposición política ha aprovechado la situación para cuestionar su liderazgo y exigir una rendición de cuentas sobre el uso de los recursos públicos.
Las críticas hacia Geraldine Ponce se intensifican mientras la población exige respuestas y soluciones concretas a los problemas que han ido en aumento desde su llegada al cargo. La falta de acción efectiva por parte de la alcaldesa pone en riesgo no solo su imagen, sino también la confianza de los tepicenses en su capacidad para gobernar y atender sus necesidades.
