El mandatario anunció la rehabilitación de San Pancho y la llegada de un tomógrafo a Tondoroque
El gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero, ha respondido a la crisis actual que enfrentan los hospitales de San Pancho y Tondoroque en Bahía de Banderas. En primera instancia, sugirió que no se le está proporcionando información verídica y precisa sobre la situación, ya que afirmó que en días recientes tanto el personal médico como los pacientes lo han felicitado por su gestión en el área de la salud.
Sin embargo, ante las versiones contradictorias entre aquellos que sufren diariamente la escasez de médicos, insumos, camas y servicios en general, y aquellos que, según la respuesta del mandatario, están satisfechos, se comprometió a revisar la situación de ambos nosocomios para encontrar soluciones.
“Anoche me comentaron que todo estaba en orden e incluso recibí felicitaciones, pero no logro entender la discrepancia entre lo que usted me cuenta y lo que he escuchado. Investigaré la situación y tomaré medidas inmediatas”, comentó.
Navarro Quintero mencionó que parte de las deficiencias actuales en el sistema de salud de los municipios del sur se deben a la falta de adecuada utilización de los recursos durante la administración anterior. Sin embargo, adelantó que una vez finalizada la construcción del hospital de Xalisco, se continuará con la rehabilitación del hospital de San Pancho y se gestionará la adquisición de un tomógrafo para la unidad de Tondoroque.
Es importante recordar que el Gobernador de Nayarit es el impulsor del sistema IMSS-Bienestar, que ya está operativo en 23 estados del país, siendo Nayarit el estado pionero. Por lo tanto, para los usuarios resulta desconcertante la ineficacia en el sistema de salud, siendo el propio gobernador su promotor.